26.10.11

Esa canción "DíasRaros-VM"

Oscuridad en la habitación, solo siluetas dibujadas por la poca luz de una pantalla de ordenador con la luminosidad al mínimo, “silencio” susurra tirada en la cama, inerte, inconsciente de mente, ojos cerrados, auriculares puestos… sonando esa canción que nada más empezar la traslada a un mundo paralelo, de paz, dulzura y sentimientos a flor de piel.
Su cuerpo responde solo, ante esta melodía, sus dedos comienzan a deslizarse por la almohada sintiendo el ritmo de cada nota, de cada suspiro, de cada latido que se va acelerando conforme avanza el tiempo.
Respiración profunda, ¿Cómo una canción puede hacerle sentir tan bien?, dejándose llevar por cada palabra pronunciada, con los vellos de punta, cada célula de su cuerpo alterada y relajada al mismo tiempo; seis minutos de puro placer para el alma oxidada de pena y traición, seis minutos de paz para el corazón castigado por desconfianza y desilusiones, seis minutos de inconsciencia para la mente agotada de absurdas preocupaciones y problemas complejos sin fácil solución, seis minutos de inactividad para el cuerpo machacado por mente, alma y corazón.
“Cierra los ojos y escucha” susurra desde ese silencio que se encuentra dentro de un cuarto oscuro, “escucha con el corazón” y comienza a bailar con sus dedos por la almohada, no cesa el ritmo y acompaña cada altibajo, “escucha la gran verdad que esconde entre palabras cifradas: Sin momentos malos no existirían los buenos momentos”

25.10.11

Falta de Don

¿Y si su máscara de cobardía no deja mostrar lo que realmente es en realidad?, ¿y si su máscara de vergüenza no le deja avanzar hasta ese punto de partida que cada vez se aleja más y más por dejar pasar oportunidades en la vida? ¿Y si decide quitarse las máscaras que le cohíben y empieza a mostrarle al mundo como es en realidad?
Una y otra vez intenta lanzarse a ese enorme mar, lleno de esperanzas como de peces nadando de un lugar para otro, miles de planes y aspiraciones que quisiera lograr, y una vez nadando, empieza a no verle fin a ese horizonte que se aleja más y más, se empieza a acobardar como siempre, perdiendo el rumbo, sin saber en qué playa acabará, naufragando en una realidad llena de pena, tristeza y desconfianza. Y vuelve a caer… porque la cobardía le coge la mano y la vuelve a meter en esa pequeña habitación sin luz.
Niña inocente, dulce y asustadiza, ¿Cuándo te volveras los suficientemente valiente para enfrentarte a aquellos que se empeñan en no dejarte avanzar, en vez de agachar la cabeza y dar marcha atrás?
Gente que le hace perder la ilusión en algo que siempre le ha dado vida, le ha hecho sentirse ella, en la que ha podido expresarse… puede que no siempre haya tenido su mayor rendimiento, que no todo su trabajo haya sido perfecto, por lo que cree que ha perdido el don al perder esa ilusión que tanto tiempo le ha acompañado.
Ella lucha por volver a encontrar en el rincón mas escondido de su corazón, en esa cuidad bella que quiere tener por hogar, en ese silencio de su alma en calma, la ilusión que un día encontró al sobrevivir de un año de maltrato a su mente y corazón. Bien sabe que llegará el momento en el que demostrará realmente de que es capaz, luchará por librarse de esa cobardía que le invade, dejando la dulce niña de utilizar sus talentos como juego y diversión para llevarlo a cabo de una forma profesional, seria e increíble. No todo el mundo es capaz de alzar la cabeza después de haber estado con ella escondida entre las rodillas durante años.
Ella es fuerte, lo sabe, solo falta demostrarlo.

24.10.11

Sombra inquieta

¿A quién echa de menos, esa sombra reflejada en la pared, ese ser sin rostro que pertenece a una misteriosa mujer, de labios finos y grandes ojos?
¿A quién espera, ahí sentada, en un paseo desierto, pidiendo deseos a estrellas fugaces en una noche nublada y tormentosa como su mente?
¿A quién quiere ver, esa mirada perdida hacia un mar revuelto con pequeñas olas que arrastran la suciedad del mar hacia la orilla, al igual que sus lágrimas derramadas por sus mejillas para vaciar el dolor de su corazón, aún con heridas sin cicatrizar que bien sabe que nunca desaparecerán?
¿A quién desea tener, que su alma desconfiada no le deja acercarse, por miedo a caer en esa espiral que no le conduce a ningún lado siempre en ese punto de partida, sin avanzar, cuando en realidad ella quiere algo más?
¿A quién le ha regalado un segundo de su vida para comenzar a pensar que ya no quiere continuar?
¿A quién pretende engañar esa sombra inquieta con cuestiones enrevesadas, si bien sabe que su corazón esta defectuoso, su alma desilusionada, su mente en caos y su cuerpo en stand-by esperando las respuestas?

Granada (L)